Un libro mágico que te ayudará a
encontrar paz, armonía interior y te guiará por el buen camino para toda tu
existencia.
“El
Libro para siempre…” se convierte en un libro diferente para cada
lector, porque cada uno tiene un destino distinto en este mundo oculto tras sus
páginas.
Resumen del libro
Una historia
épica y atrapante que revela un misterio milenario encerrado en las páginas de
un libro mágico.
Alfredo, un
andinista procedente de la Provincia de Mendoza, que desea ascender al Monte Everest viaja al corazó del Tibet y en su viaje se
suma a una expedición dispuesta a coronar la cima por el Collado Norte donde vive una intensa aventura.
En su intento
por alcanzar la cima del monte más alto del mundo, conoce a Tubten un nepalí
con quien entabla amistad y quien le obsequia un texto milenario que se convertiría en el mayor tesoro que jamás imaginó: “El Libro para Siempre...”
Alfredo descubre
al intentar leerlo que el libro guarda un misterioso secreto. Dispuesto a
revelarlo, conocer a un sherpa de nombre Niealam, quien le indica el
camino al Monasterio de Hiroshi, donde el maestro Jamyang, un anciano
monje, le revelará que tiene en sus manos un tesoro secretamente guardado
por los discípulos del Templo y al cual sólo podrán acceder aquellos que respeten
su esencia y conserven la Fe, para quienes el libro adquiere... “Magia”.
Esa es la escencia y la magia que el autor nos revela en esta edición.
Esa es la escencia y la magia que el autor nos revela en esta edición.
Este libro fue escrito para aquellos que como tú
sueñan con un mañana mejor.
Es por eso que deseo de corazón que
en sus páginas encuentres ese tesoro
que he escondido para ti; esperando ahí,
que un día cualquiera, cuando precises
levantar el ánimo te empuje aún más
para alcanzar aquello que anhelas, porque
todos tenemos un sueño que cumplir.
El autor.
Una historia
atrapante y la revelación de “El Libro para Siempre...” pone en
tus manos un legado que quedará en tu memoria para toda la vida. Escrito para aquellos que cultivan la paciencia, para quienes sus
sentencias se tornan perdurables.
“El
Libro para siempre...” consta de versículos que combinados entre sus
cuatro capítulos adquiere características que te permitirán formar más de
20.000.000 (si leíste bien más de 20 millones) de frases de ayuda espiritual
dictadas por el Dai Hiroshi en su monasterio para aquellas almas que necesitan
consejo y ayuda espiritual.
Una vez que
comprendas su legado, no podrás dejar de leerlo por siempre y para toda tu
vida.
EPÍLOGO
Alfredo, finalmente encontró en las páginas
de este libro el tesoro más valioso de su existencia y sus sueños por
conquistar el Everest dejaron de atormentarlo.
A su regreso a Mendoza sentía que no en vano
había viajado al Himalaya donde, de la mano de un desconocido del que nunca se olvidaría,
había recibido el más preciado de los valores que jamás imaginó: “El Libro para
Siempre...”.
Tubten le había entregado una inapreciable
riqueza al compartir con él la magia de este libro.
Tal como cuenta la leyenda, si quieres
acaparar su sabiduría en un santiamén, esta se esfumará de tus manos, así como
perdieron la fe los discípulos de Hiroshi que agobiados por el egoísmo y la
avaricia no creyeron en él.
Solo utiliza el libro cuando sientas que lo
necesitas y él te hablará solo a ti. Compártelo si quieres con tus más íntimos
y ellos tendrán su propio libro, distinto del tuyo y eso es parte de su magia.
En cada capítulo encontrarás pequeñas frases
que combinadas alcanzan para formar millones de pensamientos y
máximas que te ayudarán en tu camino.
Toma una página cualquiera del capítulo uno,
luego haz lo mismo con cualquier página del capítulo dos y así hasta el cuarto.
Al terminar habrás completado un pensamiento solo para ti.
Recuerda… hay millones de posibles
combinaciones, pero no te apresures por verificar que ello sea así… o la magia
habrá desaparecido y como muchos pensarás que esto es una falacia.
Usa el libro solo cuando intuyas que
precisas un consejo o tengas necesidad de aliento.
Alfredo decidió compartir este libro,
sabiendo que solo conocerán su magia aquellos que crean en él.
Seguramente la curiosidad te tentará. Se
paciente. No pierdas la fe.
Por cierto, Alfredo no abandonó
del todo su pasión por la montaña y hoy viaja regularmente al pie del Aconcagua
donde alza la vista al cielo para recordar con una plegaria a su amigo Tubten, a
quien da gracias por compartirle la mayor riqueza que jamás imaginó.